31.3.09

1. Leaving it all behind.

Las horas nunca se habían hecho tan largas para ella. Apenas llevaba 2 horas de vuelo, y ya quería aterrizar en suelo europeo, y comenzar otra vida. Lástima que Francia no estaba tan cerca de Huntington Beach, California. Lejos estaba la playa de arena ni tan fina, ni tan blanca, pero perfecta para caminar en las tardes, pero sobre todo, él estaba lejos ya. Irónicamente, mientras más se alejaba de ese lugar, más cerca sentía los recuerdos de todas esas cosas que solo vivían en la mente de los dos, y de nadie más. Se sentía como quien cruza un puente, para después incendiarlo y de esa forma asegurarse de no volver a cruzarlo jamás, de no volver a regresar. 

En ese mismo instante, figuradamente, estaba cruzando ese puente. Todavía tenía la opción de regresar, y pretender que nada había pasado, todavía podía volver a su vida normal. Estaba a tiempo de prever cualquier error. Pero después de todo, si no hubiera querido arriesgarse, no estaría ahí, a miles de pies de altura, encerrada en ese avión con otras 599 personas más, por once horas. 

Había pensado en todo lo que haría para mantenerse entretenida. Había traído dos libros, su laptop, y su diario, pero nada de eso le atraía en el momento. Intentó dormir...lo consiguió por 4 horas, ahora llevaba 
6 horas de viaje, y todavía le faltaban 5. Abrió su laptop, agradeciendo que las lineas europeas tuvieran internet inalámbrico en sus vuelos. Casi por instinto, abrió su mail. No se mostró muy emocionada al ver que no tenía nada nuevo. Llegó a pensar que él ni siquiera se veía afectado por su partida tan pronta, casi tan improvisada...estaba huyendo, literalmente. Pero de qué huía en realidad?

Ni ella misma lo sabía. 

Podía ser una mezcla de muchas cosas. Factores, que combinados, daban el resultado de una ecuación incompleta, fallida en su totalidad. Huía de todo y de nada. Principalmente de él, de sí misma, y de todo eso que sentía cuando estaban juntos. Todo era ideal, tan ideal que le asustaba. Aún así, no creía que eso fuera
suficiente para excusar su huída sin previo aviso...a nadie le dijo nada. Solo dejó una carta de renuncia en su trabajo, y una carta arrugada debajo de la puerta del apartamento de Brian, que no daba ninguna explicación de su partida...solo un simple "Tengo que irme, te echaré de menos" y su firma a medio terminar. 

No tenía el valor para despedirse de él cara a cara. Sabía que eso la iba a deshacer lentamente, desde muy dentro. 

Y se preguntaba, a él le importaría su partida? le dolería? intentaría buscarla?. Ahí se daría cuenta de qué tan importante fué ella en su vida, si lo marcó, o simplemente le dejó un puñado de besos agridulces, y buenas impresiones. Nada era certero en cuanto a él se refería, pero siempre estuvo conciente del terreno que pisaba. Creía saber los riesgos de estar con alguien como él...pero estaba equivocada. 

1 comentario:

meep dijo...

OMFG
ME ENSEÑAS A E SCRIBIR
YO TENGO UNA REDACCION DEL ASCO Y SOLO ESCRIBO 3 PARRAFOS
NO MA!!!!
TU RULEAS MIS CALCETINES Y LO QUE LE SIGUE XD
TQ1CH!!!
CONTINUALE EEH